Santuario de Luciérnagas: espectáculo natural de cuento de hadas

Tlaxcala es uno de los estados más pequeños de la república, con una gran riqueza natural, cultural e histórica. En este pequeño estado se encuentra el Santuario de Luciérnagas y un hermoso espectáculo natural impartido por estos pequeños insectos, que parece sacado de un cuento de hadas.

Este espectáculo natural toma lugar en la temporada de verano, entre los meses de junio y julio, mayor parte en este último. Durante este mes las luciérnagas han alcanzado su edad adulta y las condiciones de humedad son propicias para el ritual de amor de estos maravillosos insectos.

Pareciese que las estrellas bajan a los bosques de oyamel del municipio de Nanacamilpa, pero dotadas con un buen par de alas. Las luciérnagas macho son quienes ofrecen el espectáculo aéreo, mientras tanto sin un par de alas tan desarrolladas, a ras de suelo y en los arbustos son las hembras quienes emiten bioluminiscencia.

Al ser un espectáculo dado por la naturaleza hay que tener en cuenta que este avistamiento de luciérnagas puede variar de un día a otro. Es de suma importancia hacer un avistamiento responsable y seguir los protocolos establecidos. Así más personas podrán disfrutar de esta maravillosa experiencia.

Entre las medidas que se toman son: 

• No hacer ruido
• No emitir luz
• Caminar dentro de los senderos

Este último es primordial como los anteriores, pero como ya se mencionó las hembras no poseen la capacidad de volar lo que los vuelve una especie que no es migratoria, por esto es de suma importancia seguir los senderos indicados y así cuidar la naturaleza.

En el municipio de Nanacamilpa hay diferentes opciones para disfrutar del Santuario de Luciérnagas y hacer ecoturismo. Así como ofertas de hospedaje, tours certificados y calificado para hacer un avistamiento de luciérnagas de manera responsable. También puedes hacer campismo y senderismo para seguir disfrutando de la naturaleza. 

Este maravilloso espectáculo culmina en un final atado al ciclo de la vida de las luciérnagas, no sin antes depositar los huevos que contienen a la siguiente generación de luciérnagas que iluminan los bosques de oyamel.